El pasado 3 de junio, en el sector de Raudal Viejo, en el municipio de Valdivia (Antioquia), unidades del Ejército Nacional fueron víctimas de un ataque con explosivos y disparos de fusil mientras realizaban operaciones de estabilidad y protección a la población civil.

La agresión fue perpetrada por integrantes del Grupo Armado Organizado (GAO) ELN y del GAO-r E36, bajo el mando de alias Matías, por quien las autoridades ofrecen una recompensa de hasta 500 millones de pesos por información que permita su captura.

Durante el ataque y los combates que siguieron, cuatro soldados profesionales y un suboficial resultaron heridos, aunque su estado de salud es estable y ya están recibiendo atención médica especializada en la ciudad de Medellín, tras ser evacuados con apoyo de la Fuerza Aeroespacial Colombiana.

Uno de los hechos más lamentables fue la muerte del canino Goma, miembro del equipo antiexplosivos del Ejército, quien falleció en el cumplimiento de su deber.

El Ejército Nacional rechazó enfáticamente este acto que calificó como terrorista, y anunció que interpondrá las denuncias correspondientes por el uso de artefactos explosivos improvisados, prohibidos por la normativa internacional.

Así mismo, reiteró su compromiso con la protección de la población civil y confirmó que continuará con operaciones militares en la zona para restablecer la seguridad en esta región del norte antioqueño.