39 días y un país en vilo tras la desaparición de cuatro menores de 13, 9, 4 años y 11 meses en las espesas selvas entre Caquetá y Guaviare luego de que la avioneta en la que volaban cayera al vacío.
Otros tres ocupantes de la aeronave, entre ellos su madre, murieron, presagiando un final no muy esperanzador.
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En la selva se internaron más de 50 hombres del Ejército e indígenas con una sola misión: encontrarlos con vida.
En medio de su odisea hallaron algunas pertenencias, como ropa y teteros, pero su rastro era un enigma.
Un perro entrenado para la búsqueda de personas desaparecidas, llamado Wilson, también se internó en la selva.
A los pocos días del siniestro aéreo, falsa alarma, pues el presidente filtró una noticia que que habían desaparecido, pero su se disipó cuando no hubo confirmación oficial.
En medio de esa salida en falso, las tropas intensifican labores y seguían penetrando una selva inhóspita.
Lesly Mucutuy (13), Soleiny Mucutuy (9), Tien Noriel Ronoque Mucutuy (4) y Cristin Neriman Mucutuy (11 meses) ahora son los ángeles guardianes de una selva que los envolvió pero que les conservó sus vidas.
Belka Company
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