Una jornada de tensión se vivió en la Universidad de Antioquia, donde cerca de 40 encapuchados protagonizaron actos violentos que alteraron la tranquilidad del campus y sus alrededores. Con el lanzamiento de bombas molotov y artefactos explosivos, pusieron en grave riesgo la vida de estudiantes, funcionarios y transeúntes, además de generar un fuerte impacto en la movilidad de la zona.

La respuesta de las autoridades no se hizo esperar. La Policía Metropolitana, apoyada por escuadrones antidisturbios, agentes de Movilidad y equipos de salud, intervino rápidamente para contener la situación.

Durante los enfrentamientos, un uniformado resultó herido por esquirlas de un artefacto explosivo. Aunque fue trasladado a un centro asistencial, las autoridades confirmaron que su estado de salud es estable y no reviste gravedad.

Uno de los encapuchados llegó incluso a disparar en repetidas ocasiones un arma de fuego contra los agentes, elevando la peligrosidad del ataque y poniendo en riesgo la integridad de la Fuerza Pública.

Gracias a la acción oportuna y coordinada de las autoridades, los disturbios fueron controlados sin mayores consecuencias para la ciudadanía.