Una detonación en torres de energía de alta tensión en el nordeste antioqueño ha encendido las alertas. Un grupo armado, presuntamente vinculado al Ejército de Liberación Nacional (ELN), habría instalado una carga explosiva en infraestructura eléctrica operada por ISA, afectando la línea de 500 kV de Porce, clave para el suministro en el municipio de Guadalupe.

La explosión se registró en una de las torres que conforman esta red de transmisión, lo que podría derivar en interrupciones del servicio eléctrico en la zona. Las autoridades ya investigan los hechos y evalúan los daños, aunque hasta el momento no se ha emitido un pronunciamiento oficial que confirme la autoría del ataque.

Este incidente pone nuevamente sobre la mesa la vulnerabilidad de la infraestructura crítica del país y la necesidad de reforzar los esquemas de seguridad en zonas estratégicas.